Los tipos más comunes de acoso que se dan en este plano tienen que ver con burlas hacia la apariencia física llevada al plano virtual o temas de género y raciales
Los videojuegos son un medio de entretenimiento y socialización común en la actualidad. En México, 66.5 millones de personas mayores de seis años son gamers y a pesar de que la mayoría son jugadores casuales, existen peligros para los usuarios más pequeños que se pueden evitar a partir de un enfoque de cuidado y consciencia en estos mundos virtuales.
Fernando Corral, CEO de la empresa para proteger a los menores en línea, Gabu, señala que el principal problema de los niños que sufren bullying en lo virtual es que se trata de un tema poco conocido por los padres, pues ellos no tienen en cuenta que plataformas como Roblox, además de ser juegos, también fungen como redes sociales. “El desconocimiento genera vulnerabilidad”, menciona.
A pesar de ello, un estudio de la firma de ciberseguridad McAfee, resalta que en México el índice de acoso comunicado a los padres por parte de los hijos fue de 41%, una cifra que se ubicó por encima del promedio mundial de 32%.
Entre los problemas más comunes que se perciben en el mundo virtual, según el documento, están el acoso en grupo relacionado con el aspecto físico de quien lo padece, su forma de vestir, así como su estilo de vida y amigos.
Asimismo, el ciberacoso por motivos raciales es un asunto que ha preocupado en diversos países, mientras que los datos de Gabu resaltan que también el género es un motivo de ciberacoso, pues cuando un usuario usa un nombre femenino, recibe 25% más comentarios negativos, al igual si revela que quien está jugando es una mujer.
Corral puntualiza que los papás no se suelen acercar a sus hijos porque en muchas ocasiones no comprenden los mundos en donde juegan los menores, algo que es fundamental para tomar decisiones informadas y evitar establecer prohibiciones en torno al uso los videojuegos, pues esto puede generar una reacción negativa por parte de los hijos.
“Tenemos que aprender a generar educación desde temprana edad a través del juego, con el fin de que sean responsables en su uso en el futuro y tengan dinámicas sanas”, menciona Corral respecto al acompañamiento de padres con hijos en los procesos digitales.
A nivel de desarrollo emocional, este acompañamiento también puede tener efectos positivos, comenta, pues les permiten abordar circunstancias donde ellos se sientan mal o frustrados por perder una partida para que aprendan a lidiar con sus emociones y con el hecho de que perder no es siempre algo negativo.