La presidenta de la Corte, Norma Piña, aceptó que envió los mensajes por WhatsApp con el senador Alejandro Armenta, quien los interpretó como una amenaza y llamó a la ministra a aclarar si es que ella los había enviado.
“Hago esta aclaración por respeto a quienes han mostrado apoyo a mi persona. Por respeto a mis pares y a mi familia. No quiero que mi silencio deje lugar a dudas. Como lo manifesté expresamente en la comunicación personal con el senador Armenta Mier, sostengo en público lo que dije en privado”, inició en una carta la ministra Piña Hernández.
La también titular del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) se dijo indignada por los datos inexactos sobre la labor del Poder Judicial y reconoció que no fue la mejor vía para comunicarse con el legislador, pero refrendó el contenido de los mensajes enviados y aclaró no se trató de una amenaza.
“Sus expresiones sobre datos inexactos, así como sobre la labor de quienes formamos parte del Poder Judicial me indignan.
“Reconozco que la vía utilizada no fue la más adecuada. Confío en que mi modo frontal y directo de hablar se distinga claramente de una amenaza”, señaló la ministra presidenta de la Corte.
“La honestidad es el criterio para construir el México que la Constitución garantiza y que las y los mexicanos nos exigen”, concluyó la ministra con la firma en su documento.
ALEJANDRO ARMENTA DENUNCIA AMENAZAS DE NORMA PIÑA
Desde la tribuna del Senado, el legislador Alejandro Armenta, denunció que la noche del martes 16 de mayo había recibido amenazas por parte de la presidenta de la Corte, Norma Piña, a través de WhatsApp con el objeto de amedrentarlo por su “desempeño legislativo”.
Durante la sesión de la Comisión Permanente de este miércoles el también presidente del Senado mostró capturas de pantalla de los mensajes que recibió a través de la aplicación de mensajería y exhortó a Norma Piña a que aclarara si ella había enviado dichos textos.
En la conversación presentada por Armenta, la ministra presidenta le cuestionaba si podría ver a los ojos “a sus hijos o hijas después de lo que dice (…), la vida nos juzgará, estoy convencida que la verdad siempre triunfa”.