Su fundación y primeros años nos muestran cuál es el corazón de la ciudad
Cuando se habla del Centro Histórico de Manzanillo, dependiendo de la persona o dependencia que lo mencione, serán los límites que se le señalen, pues para algunos incluye un área pequeña, mientras que para otros abarca desde San Pedrito y Punta Chica hasta la Colonia Bonanza.
EL CASCO ANTIGUO
Oficialmente podríamos decir que, toda aquella parte de nuestra ciudad que no pertenece a una colonia, ese es el centro histórico, lo cual nos remitiría únicamente a unas pocas calles, algunas de las cuales, sin embargo, no existían cuando Manzanillo inició. Hay que decir que a lo que en Europa, como en España, por ejemplo, se le llama casco antiguo, nosotros en América les llamamos centros históricos, que es la parte vieja de una ciudad, donde esta se fundó.
Así, aunque una ciudad crezca muchísimo, partiendo de haber iniciado pequeña, el centro histórico será aquel en donde todo comenzó, incluso, cuando ya no fuera la parte más importante de la ciudad. Como sabemos, originalmente la parte de la bahía de Manzanillo que corresponde a la cabecera municipal, donde está el centro de la ciudad, estuvo deshabitado por falta de agua potable y condiciones insalubres durante toda la época de la Colonia, solo teniendo visitantes ocasionales, estando los asentamientos humanos principales de esta zona que hoy corresponde a nuestro municipio en Salagua/Santiago y sus alrededores.
EL MANZANILLO Y LA CALLE DE LA LAGUNA
Es hasta pasada la independencia en 1821 que el gobierno estatal empieza a estudiar la posibilidad de hacer un puerto comercial y asentamiento humano en la llamada Bahía de El Manzanillo (llamada así por el árbol venenoso de ese nombre que ahí proliferaba). El 12 de abril 1824 Francisco Anguiano es enviado como regidor del Ayuntamiento de Colima para delimitar la zona frente al mar que se destinaría para las operaciones portuarias, y se procede al desmonte y nivelación del terreno.
Esta área corresponde a La Perlita, y para ese momento aún no vivía nadie de forma permanente en Manzanillo. Los trabajos se fueron alargando también hacia el área de lo que hoy es El Playón. También en ese mismo año, con la mira puesta en el futuro puerto, se abre la Calle de la Laguna, formándose con tres cuadras, que iba desde El Playón hasta la esquina con lo que hoy es la calle Miguel Allende (en ese tiempo inexistente), que es donde empezaba la laguna.
Era una calle muy baja en cuanto a su nivel, por lo que se dice que cuando subían las olas, corrían por esta calle hasta llegar al vaso lacustre. Esta vialidad luego cambió con el tiempo su nombre a Calle Principal, y finalmente, hasta llegar a ser la Calle México, ya bastante más larga, gracias a los rellenos que se le han ido haciendo a la laguna. Luego que el 19 de febrero de 1825 el gobierno federal le diera el visto bueno a la creación del puerto de Manzanillo -todavía deshabitado- tras un reconocimiento in situ hecho por el Capitán Narváez, el 7 de octubre de 1825, el gobierno federal ordenó el traslado del Puerto de Salagua a Manzanillo.
LOS PRIMEROS ASENTAMIENTOS
Muchos de los primeros habitantes de la ciudad se asentaron en las laderas de los cerros, por ser las zonas más salubres de la ciudad, pues hasta allá no alcanzaban a llegar las miasmas de las lagunas, sobre todo la de Caimanes o Cuyutlán, que fueron causa de muchas epidemias. Estos cerros, que aún no tenían una identificación clara, equivalen a lo que hoy son el Sector 1 y el 4. El 15 de noviembre de 1825 se hizo la construcción de la Aduana Marítima por obra de J. Jesús Ochoa, en el terreno previamente desmontado, entre lo que hoy son las calles Francisco I. Madero y México.
RELLENOS A LA LAGUNA
Para 1846 apenas se tenían contabilizadas de acuerdo al censo a cincuenta y un personas habitando Manzanillo, y en 1855 el fundo legal señalaba que había catorce manzanas. Cuando en abril de 1858, el Presidente Benito Juárez estuvo en Manzanillo, se hospedó en el Mesón de Fermina, propiedad de un español, sobre lo que hoy es la calle Juárez, y se menciona que enfrente reventaban las olas del mar, pues aún no se ganaba terreno al océano, como se hizo en época posterior.
Por cierto que en 1860 se hizo un terraplenado de calles del puerto con rocas y tierras, y fue hasta entonces que se hicieron algunos rellenos a la laguna, los cuales permitieron que algunas calles, como la de la Laguna o Principal (hoy México) se extendieran un poco más.
Entonces, si hablamos de un asentamiento original de la ciudad, que vendría a ser lo que se denomine como Centro Histórico de Manzanillo, este debe comprender solamente la parte de la ciudad del lado del mar, sin comprender ninguna parte de ella del lado de la laguna, que se pobló mucho después.
Empezaría desde La Perlita, lo que hoy es la calle Juárez y el Sector 4 hasta llegar al Sector 1, y la Calle México, desde la Juárez hasta el cruce con la Calle Allende (antes Colima). Esta fue la parte de la ciudad que primeramente se empezó a poblar, y por lo tanto, en el sentido estricto de la palabra, este sería su Centro Histórico o Casco Antiguo.